¿Estás cansado de recibir llamadas comerciales que te interrumpen en el trabajo, en la comida o en el descanso? ¿Te molesta que te ofrezcan productos o servicios que no te interesan o que ya tienes contratados? ¿Te preocupa que tus datos personales sean usados sin tu consentimiento o vendidos a terceros?
Si la respuesta es sí, este artículo es para ti. Te vamos a explicar cómo acabar con las llamadas comerciales no deseadas, qué derechos tienes como consumidor y qué medidas puedes tomar para proteger tu privacidad, para que no te vuelvan a inundar con llamadas inútiles y que te hacen perder el tiempo.
Qué son las llamadas comerciales
Las llamadas comerciales son aquellas que realizan las empresas o los profesionales para ofrecer sus productos o servicios a los consumidores. Estas llamadas pueden tener fines informativos, publicitarios o de venta directa. Las llamadas comerciales pueden ser realizadas por personas o por sistemas automatizados, como los robots o las máquinas de voz.
Estas pueden ser legítimas o ilegítimas. Las llamadas legítimas son aquellas que cumplen con la normativa vigente y respetan los derechos de los consumidores. Las ilegítimas son aquellas que incumplen la ley o que se realizan sin el consentimiento o la autorización de los destinatarios.
Las llamadas comerciales son una práctica muy extendida y frecuente en el ámbito empresarial. Según un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el 96% de los españoles ha recibido alguna vez una llamada comercial, y el 69% recibe al menos una al día. Además, el 77% de los encuestados considera que las llamadas comerciales son molestas o muy molestas, y el 83% afirma que no le han servido para nada.
Estas tienen como principal motivo y objetivo aumentar las ventas y los beneficios de las empresas o profesionales que las realizan. Para ello, utilizan técnicas de marketing y persuasión, que buscan captar la atención, el interés y la confianza de los consumidores, y convencerlos de que adquieran sus productos o servicios. Sin embargo, estas técnicas pueden ser más o menos éticas y respetuosas, dependiendo de la forma y el contenido de las llamadas comerciales.
Por qué son molestas las llamadas comerciales
Las llamadas comerciales pueden ser molestas por varias razones:
- Interrumpen la actividad o el descanso de los consumidores, generando estrés o irritación.
- Consumen tiempo y recursos de los consumidores, que tienen que atender o rechazar las llamadas.
- Pueden ser engañosas, fraudulentas o abusivas, induciendo a los consumidores a contratar productos o servicios que no necesitan o que no se ajustan a sus condiciones.
- Pueden vulnerar la privacidad y la seguridad de los consumidores, al recabar o utilizar sus datos personales sin su conocimiento o consentimiento.
Cómo acabar con las llamadas comerciales
Existen varias formas de acabar con las llamadas comerciales no deseadas, dependiendo del tipo de llamada y del origen de la misma. Algunas de estas formas son:
- Inscribirse en el Registro General de Oposición al Tratamiento de Datos con Fines de Publicidad (ROBINSON), que es un servicio gratuito que permite a los consumidores manifestar su voluntad de no recibir publicidad por cualquier medio.
- Bloquear las llamadas comerciales en el teléfono, mediante aplicaciones específicas, listas negras o modos de silencio.
- Denunciar las llamadas comerciales ilegítimas ante la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), que es el organismo encargado de velar por el cumplimiento de la normativa sobre protección de datos personales.
- Reclamar a las empresas o profesionales responsables de las llamadas comerciales, solicitando la cancelación o rectificación de los datos personales, el cese de las comunicaciones comerciales o la indemnización por los daños y perjuicios causados.
Otras cosas a tener en cuenta
Además de estas formas, también hay que tener en cuenta que las llamadas comerciales pueden tener algunas ventajas e inconvenientes para los consumidores. Por un lado, las llamadas comerciales pueden ser una forma de informarse sobre productos o servicios que puedan ser de interés o utilidad, o de aprovechar ofertas o descuentos especiales.
En otra instancia, las llamadas comerciales pueden ser una fuente de molestias, intrusión e ilegalidad, que afectan negativamente a la privacidad, la tranquilidad y el bolsillo de los consumidores. Por eso, es importante que los consumidores sean conscientes y críticos con las llamadas comerciales que reciben, y que ejerzan sus derechos y sus opciones para acabar con las que no desean.
Consejos prácticos para evitar las llamadas comerciales
Además de las formas que hemos visto para acabar con las llamadas comerciales no deseadas, también hay algunos consejos prácticos que puedes seguir para evitarlas o reducirlas. Algunos de estos consejos son:
- No facilitar tu número de teléfono a empresas o profesionales que no conozcas o que no te generen confianza. Si te lo piden, pregunta para qué lo quieren y cómo lo van a tratar.
- Leer atentamente las condiciones y la política de privacidad de los servicios o productos que contrates o uses, y asegurarte de que no autorizas el envío de comunicaciones comerciales por defecto. Si no estás de acuerdo, desmarca las casillas correspondientes o ejerce tu derecho de oposición.
- Colgar o no contestar a las llamadas comerciales que recibas, si no te interesan o si no sabes quién te llama. No te dejes presionar ni intimidar por los comerciales, y recuerda que puedes colgar en cualquier momento.
- No devolver las llamadas perdidas o los mensajes de voz que recibas de números desconocidos o sospechosos. Pueden ser una trampa para cobrarte tarifas abusivas o para obtener tus datos personales.
- No facilitar ni confirmar tus datos personales ni bancarios por teléfono, a menos que seas tú quien haya iniciado la llamada y estés seguro de la identidad y la legitimidad del interlocutor. Desconfía de las ofertas demasiado buenas para ser verdad, o de las llamadas que te pidan que realices alguna acción urgente o inusual.
No mas llamadas aparatosas
Las llamadas comerciales son una forma de comunicación entre las empresas y los consumidores, que puede tener ventajas e inconvenientes. Sin embargo, cuando las llamadas comerciales son no deseadas, pueden resultar molestas, invasivas e ilegales. Por eso, es importante que los consumidores conozcan sus derechos y las formas de acabar con las llamadas comerciales no deseadas. Así, podrán proteger su privacidad, su tranquilidad y su bolsillo.