Con la llegada de las eSIM, muchas personas están buscando una manera rápida y sencilla de convertir su tarjeta SIM física en una eSIM, especialmente en dispositivos Android. Aunque este proceso parece complicado al principio, es sorprendentemente fácil una vez que se conoce el procedimiento correcto. A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber para realizar este cambio y qué ventajas tiene utilizar una eSIM.
Desde su lanzamiento en 2016, la eSIM ha comenzado a ganar terreno entre los usuarios de dispositivos móviles. Mientras que la SIM tradicional era una tarjeta física que insertabas en tu teléfono, la eSIM es virtual y se aloja directamente en el hardware del dispositivo. Esto no solo permite más flexibilidad al cambiar de operadora, sino que facilita el uso de múltiples perfiles en un mismo terminal.
¿Qué es una eSIM?
Una eSIM, o SIM integrada, es un pequeño chip que viene incorporado dentro de dispositivos móviles como smartphones, tablets o relojes inteligentes. A diferencia de la SIM física, la eSIM no se puede retirar ni cambiar de manera física, ya que todo se maneja de forma digital. Esto no es solo una ventaja en términos de simplicidad, sino también en cuanto a durabilidad, ya que al no ser una tarjeta física, no puede romperse o perderse. Además, puedes gestionar múltiples perfiles de operadoras en un mismo dispositivo con eSIM, lo que facilita los cambios rápidos de operador o el uso de diferentes tarifas en viajes internacionales.
Cómo saber si tu móvil es compatible con eSIM
Antes de convertir tu SIM física en una eSIM, lo primero que debes comprobar es si tu dispositivo es compatible. En dispositivos Android, existe un sencillo truco: abre la aplicación de llamadas e introduce el código *#06#. Este código te mostrará una serie de números, incluyendo el IMEI y el ICCID de la tarjeta SIM. Si tu dispositivo es compatible, también aparecerá el código EID (Embedded Identification Document), que tiene 32 dígitos.
En caso de que no veas el número EID en la lista, es probable que tu dispositivo no sea compatible con eSIM. Sin embargo, algunos dispositivos Samsung como los Galaxy S21 en adelante, y varios modelos de Google Pixel, ya cuentan con esta tecnología. Si tienes dudas, también puedes consultar las especificaciones de tu dispositivo o verificar si tu operadora incluye tu móvil en su lista de compatibilidad.
Operadoras compatibles con eSIM
En España, la eSIM está disponible en una gran cantidad de operadoras. Algunas de las más relevantes son Movistar, Vodafone, Orange, O2, Yoigo, Jazztel y Pepephone. Cada una de estas compañías ofrece su propio procedimiento para activar una eSIM, pero en la mayoría de los casos, este proceso implica escanear un código QR proporcionado por la operadora.
Cómo convertir tu SIM física en una eSIM en Android
Si tu dispositivo es compatible y tu operadora lo permite, convertir tu SIM en una eSIM es bastante simple. Solo necesitarás seguir estos pasos:
- Accede a los Ajustes de tu teléfono.
- Ve a la sección de Conexiones o Redes e Internet.
- Selecciona Administración de SIM o Administrador SIM.
- Después, elige Convertir SIM física a eSIM.
Una vez hecho esto, tu móvil realizará el proceso de conversión automáticamente. En algunos casos, puede que la opción no esté disponible, aunque puedes intentar hacerlo manualmente a través de los ajustes de la SIM. Si tienes problemas, es recomendable contactar con tu operadora.
¿Qué hacer si tu operadora no permite el cambio?
En algunos casos, puede que la conversión no esté disponible directamente desde los ajustes del dispositivo. Si este es tu caso, lo más común es que tengas que pedirle directamente a tu operadora el código QR correspondiente. Para esto, puedes contactar con ellos por teléfono o acudir a una tienda física. Una vez tengas el código, simplemente escanearlo desde la cámara de tu teléfono activará tu eSIM y desactivará tu SIM física.
Ten en cuenta que algunas operadoras pueden cobrar una tarifa por este servicio. Por ejemplo, Movistar cobra un pequeño importe por realizar cambios de eSIM en algunas tiendas físicas, aunque esto depende del tipo de contrato que tengas.
Ventajas de utilizar eSIM
Uno de los grandes beneficios de la eSIM es que no tienes que lidiar con tarjetas físicas, lo que te permite cambiar de operador sin tener que esperar a que te envíen una nueva. Además, dado que puedes almacenar múltiples perfiles de operadoras, es perfecto para personas que viajan y necesitan un número local temporal o para quienes desean cambiar de operadora sin necesidad de cambiar la tarjeta SIM.
Otra ventaja importante es la protección frente al desgaste físico. Al ser un componente digital, no hay riesgo de que la tarjeta se rompa o se dañe, lo cual es un problema frecuente con las SIM físicas, sobre todo al manipularlas para insertarlas en el teléfono.
También es importante destacar que las eSIM son más eficientes en términos de batería, ya que no requieren interacción con una tarjeta física para gestionar las conexiones de red. Esto puede suponer una ligera mejora en la autonomía del dispositivo.
Además, la eliminación de la ranura para tarjetas SIM permite a los fabricantes diseñar teléfonos más delgados y ligeros, dado que no necesitan reservar espacio para este componente físico.
Finalmente, aunque el proceso de adopción de la eSIM aún está en marcha, es evidente que ofrece una serie de ventajas en términos de funcionalidad y comodidad, que dejarán atrás a las SIM físicas. Con Android 14, se espera que esta tecnología sea más accesible para todos los usuarios, eliminando la necesidad de recurrir a la operadora para realizar el cambio de SIM a eSIM.
El futuro de las móviles está teniendo un cambio constante hacia la digitalización, y la eSIM es un claro ejemplo de ello. Mantenerse al día con estas tecnologías y sus ventajas es fundamental para sacar el máximo provecho a los dispositivos actuales.